Coca Duarte, Académica de la Escuela de Teatro UC, dramaturga, directora e investigadora teatral. Es Máster en Teatro de la City University de Nueva York y Doctora en Filosofía Mención Estética y Teoría del Arte de la Universidad de Chile. Nueve de sus textos teatrales han sido llevados a escena, obteniendo diversos reconocimientos. Entre ellos, destacan: Mala leche (1997), Juana de Arco, el Misterio de la Luz (2000), Mal (2001), Plaga (2010), y Ciencia/Ficción, esta última escrita junto a Cristián Ruiz, y estrenada en el Teatro UC en 2010. Ha dirigido dos de sus obras: Desierto en 2002 y Hay que tomar para ahogar las penas en 2005. El año 2006, dirigió Cenizas de Neda Brkic, estrenada en el Centro Cultural Matucana 100 y el 2019, Recuerdos incompletos de un reloj de Cristián Ruiz, estrenada en Teatro Camilo Henríquez. Entre los años 2011 y 2013 fue Directora de la revista Apuntes de Teatro de la Escuela de Teatro UC y ha publicado diversos artículos críticos en torno a dramaturgia tanto clásica como contemporánea. Actualmente es Subdirectora de la Escuela de Teatro UC y co-directora de La Máquina Teatro, compañía con más de 20 años de trayectoria.
ESCRIBIR LA ESCENA, TRAZAR EL PRESENTE
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El libro Escribir la Escena, Trazar el Presente escrito por Coca Duarte es una verdadera contribución a la teoría y la práctica del texto teatral contemporáneo, porque analiza y propone dos conceptos –o categorías– que se revelan útiles tanto para comprender las operaciones textuales del teatro contemporáneo como para generar ejercicios de escritura que puedan resultar inspiradores para los jóvenes dramaturgos: fragmentación y narratividad.
Tal como la misma autora lo señala, “la escritura teatral contemporánea desafía las categorizaciones” y puede que existan otras operaciones que se realizan en los textos teatrales contemporáneos que aún habría que distinguir y analizar; sin embargo, la conceptualización de estos dos procedimientos es un enorme avance en la comprensión y la interpretación de muchas dramaturgias que, sin ceñirse a la forma dramática, son particularmente eficientes para dar forma a lo real.